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Se oye cantar ♫


Llamarada Caoba

Otro trocito más de la historia de Mirna...


Entro a clase y coloco mi cazadora en el respaldo de mi asiento. Voy sacando las cosas y de repente una llamarada de un intenso color caoba pasa por mis ojos. La sigo un poco con la mirada desconcertado, y aquella hoguera deja su mochila en la mesa de mi compañera Charlotte. Después el fuego se coloca delante de mí y me mira con mirada desafiante.
- ¿Qué? –me acusa.
Yo evalúo a mi paranoica amiga y le sonrío. Le revuelvo el pelo un poquito y le sonrío.
- Estás perfecta.
Charlotte se ríe un poco a la vez que se sonroja levemente.
Parloteamos sobre todo un poco, qué es lo que hicimos ayer, qué nos pusimos, qué música escuchamos. Pueden parecer conversaciones insustanciales, pero no lo son. La verdad es que Charlotte odia ese tipo de conversación, conversaciones sobre temas tontos que no van a ningún lado. En cambio las nuestras siempre tienen un poco de magia que las hacen especiales, las hacen multicolores, arco iris en las palabras.
(Si no fuese así, Charlotte no me hablaría. Una de sus principales manías es su cierre automático para los ¿Qué te cuentas? Cuéntame algo. Ay, hoy me ha pasado esto (nada interesante pero que le cuesta un truñón al que te lo cuenta y es un tostón.)
Entonces entra el profesor y suelta un gruñido. Nos callamos pero continuamos nuestra conversación con papel y lápiz.
Escribimos frenéticamente soltando a veces discretas risitas.
-Charlotte, ¿Le importaría contestar a la pregunta?
Charlotte se sonroja y yo hago como que me río y me tapo la boca, susurrándole la respuesta. Charlotte contesta tartamudeando y el profesor asiente malhumorado.
"Gracias", Escribe Charlotte.
"De nada, Charles", contesto yo. Charlotte esboza una sonrisa enfurruñada por el mote y gira la cabeza para atender a la clase.

Toca el timbre y mi pelirroja compañera se va a, mientras que yo me voy a Diseño Gráfico.
Charlotte estudia Humanidades y yo el bachillerato de Artes.
Mientras camino hacia mi clase cavilo sobre el nuevo color de pelo de Charlotte.
Le preguntaré por qué se lo ha teñido al salir de clase. Ser compañero de ella es fácil, pero ser su amigo no. A mí me costó mucho ver la diferencia entre estas dos cosas. Realmente, ella odia la dependencia, porque es precisamente un ser muy dependiente. Así que llegué a la conclusión de que prefería dar una imagen amable y condescendiente de sí misma, una imagen con la que te podías desahogar si tu novio te dejaba, si te ponían un cero o si tus padres no te dejaban salir… Pero no una persona con la que ir al cine, o comprarte ropa.

Charlotte y yo coincidimos en matemáticas y hablamos de las clases anteriores. Después vamos juntos al patio y nos sentamos en un banco.
Supongo que sabe que no le voy a preguntar sobre su pelo hasta que ella de algo así como una señal que me permita hacerlo. Entonces podré recibir una respuesta acompañada de una breve historia.
Charlotte y yo somos así. Esperamos el momento adecuado para hacer las cosas, para que den mejor resultado y sean más bonitas o entretenidas.

No coincidimos en ninguna clase más, hasta la salida.
Entonces, sacando el tema como si nada, le pregunto:
-¿Y a qué se debe este rojo cambio?
Charlotte no contesta al instante y se queda un ratito pensando.
-Era… La necesidad. La necesidad de un cambio, de guardar los recuerdos asociados a mi pelo… Y de no querer parecerme a Ella.
Yo me quedo en silencio pero sonrío. Sé que se refiere a Mirna…
-Hmmm. Déjame pensar… - me llevo la mano a la barbilla- ¡Solo puedo recordaaaaar…!
-¡Mi mataderoooo! –contesta Charlotte gritando también. Nos cogemos de las manos y damos vueltas medio bailando, para cantar al unísono - ¡Clandestino como mi escapaadaa!

La gente nos mira raro y nosotros reímos a carcajadas. Nos compramos un helado de tarta de queso y seguimos bailando, cantando y subiéndonos a los bancos como si fuera un escenario, el helado nuestro micrófono y los transeúntes nuestro público.

Charlotte y yo somos felices a nuestra manera.
Read More 2 susurros | Una parte del día, Mirna edit post

2 susurros

  1. HackberryA10 on 21 de marzo de 2009, 17:58

    Lo de los simbolos será cosa del codigo HTML o vete tu a saber por que, sustituyelos por [corchetes por ejemplo] o por algo similar.

    saluDOS y si que es por el HTML, mira a ver si puedes cambiar y escribir en otro idioma de internet.

     
  2. Arwen Undómiel on 21 de marzo de 2009, 18:23

    sí que debe ser eso, pero es un coñazo, a mi también me pasa. yo que lo usaba para escribir diálogos pensados en vez de hablados en historias... una vez escribí algo muy muy muy largo y se me borró qué guay la historia^^ y qué si es un blog triste? mola. el mío es mas triste aun, hasta es negro y todo...
    salu2

     


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